Safari en Kenya



Ir de safari a África es algo que todo el mundo debería experimentar en su vida. Yo tuve la oportunidad de ir en Tsavo National Park en Kenya, cerca de la ciudad de Mombasa. La gente que va de safari a Kenya normalmente lo hace en Masai Mara, el parque más famoso, pero ese parque está cerca de Nairobi.
Desde Mombasa a Tsavo Park hay unos 300 km y se tarda unas horas. Fuimos con un conductor que nos organizó el hotel en un paquete de día completo que incluía el viaje, parada en un museo, la entrada al parque y la comida en un lugar increíble del que hablaré mas tarde. 
El precio fue unos 250 euros por dos personas. Si compartes el coche con otros turistas sale mas barato, pero era temporada baja y no había mas gente.


El viaje comenzó sobre las 5 de la mañana. De camino al parque paramos en una gran tienda de antiguedades africanas que parecía un auténtico museo. Era un sitio inmenso e increíble, con piezas como las de la foto anterior.
El lugar también tenía una pequeña cafetería, donde tomamos café al amanecer antes de continuar el viaje (foto siguiente).
Había estado lloviendo los días anteriores, y todo el paisaje estaba verde y lleno de charcas.


El parque ocupa una superficie de 21.000 km², (dividido en la zona este y oeste) y está situado en una zona semiárida conocida anteriormente como el Desierto Taru.
El parque es una llanura inmensa, por donde se puede ir libremente siempre que no te salgas de los caminos. Puedes dirigir al conductor por el camino que prefieras, pero en ningún momento puedes bajar de coche, aunque convencimos al conductor para bajar a hacernos una foto rápida, que dejo más abajo. El coche está abierto por la parte de arriba, con lo que puedes ir de pie para ver mejor.


La mayor parte de este parque está formado por sabana, con arena roja, matorrales, lagos y árboles bajos.
Contiene una gran biodiversidad y gran cantidad de vida fauna incluyendo los cinco grandes: león, rinoceronte negro, búfalo, elefantes y leopardos. También contiene gran diversidad de pájaros.


Los animales que ves depende de la suerte y del tiempo que tengas. Se recomienda pasar una noche en el parque en los campamentos que tiene para ver todos animales, ya que el lugar es muy grande, y cada especie está en una zona.
Por ejemplo nosotros no pudimos llegar hasta la zona del río ya que se necesitan dos días, así que no vi cocodrilos o hipopótamos.
Sin embargo si vi varios grupos de elefantes con bebés, búfalos, gacelas, avestruces, monos, cebras,  jabalís, y al final del día cuando ya creía que no las vería jirafas.



A la hora de comer nos dirijimos al restaurante que estaba reservado que se encontraba en Lion Hill Lodge, uno de los hoteles del parque que estaba en lo alto de una colina. El lugar era increíble y ¡se podían ver desde allí las manadas de elefantes abajo en la sabana y oir los sonidos que hacían!
El restaurante estaba en la terraza y había varias casitas por la colina que eran las habitaciones, incluso tenía piscina. 


El menú era muy sencillo, pero la experiecia en global nos gustó mucho. Se trataba de una sopa de pepino, algo que nunca habíamos probado, un plato principal a elegir que yo pedí de carne con arroz y verduras y un plato de frutas frescas de postre.  
No todos los días se come en un sitio así. Abajo dejo más fotos del hotel, algunas de internet.


Tras la comida seguimos el recorrido para ver más animales, hasta que se fue haciendo tarde y decidimos volver.
Debido a la lluvia y la entrada en la ciudad el atasco duró varias horas, la verdad fue una situación desesperante. El conductor decidió entonces salirse de la carretera e intentar llegar a la ciudad campo a través pasando por poblados locales, lo que es bastante peligroso. Las calles de tierra estaban llenas de charcos y barro, y si el coche se quedaba atascado es posible que nos robaran.
Por suerte todo fue bien y llegamos al hotel depués del largo viaje. Durante el paso por esos poblados pude hacer discretamente el video que dejo abajo.



Esta es la foto que me pude hacer fuera del coche





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